20.5.09

En una oportunidad, me acompañó a casa y al decirme buenas noches, con un gesto inesperado me tomó la mano y me besó el dedo índice. Luego lo mordió con fuerza. El asombro y el dolor me hicieron jadear. Me miró sin sonreir.

-Nunca tenés qe confiar en mí, no lo olvidés nunca.

2 comentarios:

  1. te recomendaria q la proxima vez lo muerdas vos xDD

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  2. jajajaja!! me encanto el comentario de XtinchoX jajaja

    estoy deacuerdo....

    sale lokita!!!:. ke esta increible tu blog...
    bezhotes!!!!

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